Módulo 1: Formas y dinámicas de la violencia doméstica y de género

5. Víctimas de violencia doméstica y de género

Imagen de Gerd Altmann de Pixabay
Definición

Los términos víctima y sobreviviente hacen referencia a aquellas personas que están sufriendo violencia de género y doméstica en el presente (víctima) o han sufrido violencia doméstica y de género en el pasado (sobreviviente). Estos términos también se usan durante procesos legales.

Descripción: el vídeo explica a quién afecta la violencia doméstica y de género.
  • Las víctimas de violencia doméstica y de género pueden pertenecer a cualquier contexto social, cultural, económico y religioso, independientemente de la edad, género y orientación sexual, inclusive las personas con diversidad funcional. Es importante entender que NO existe la «víctima prototipo».
  • La violencia doméstica y de género a menudo se vive como algo ajeno. Muchas veces, las personas a las que no les afecta directamente no entienden por qué la víctima no deja a la persona que la maltrata o por qué no habla de ello con nadie.

Las víctimas en las dinámicas de violencia doméstica y de género en las relaciones

La violencia doméstica y de género en las relaciones sigue un patrón. El siguiente vídeo lo explica más detalladamente.

Descripción: el vídeo muestra los tipos de malos tratos en una relación a través de la historia de John y Jane. Ten presente que las víctimas y las personas agresoras pueden pertenecer a cualquier contexto social, cultural, económico y religioso, independientemente de la edad, género y orientación sexual, inclusive las personas con diversidad funcional.

Ejercicio de reflexión

Responde a las preguntas de las imágenes que se muestran a continuación respecto al vídeo. Verás las respuestas en la diapositiva que sigue a cada pregunta.

Ciclo de la violencia

Es importante tener presente que no todas las relaciones de maltrato siguen este patrón al pie de la letra. Sin embargo, el ciclo de la violencia es una buena base para entender la trayectoria tanto de la víctima, como de la pareja maltratadora, además de la complejidad de la violencia doméstica y de género.
Muchas veces, el ciclo de la violencia doméstica y de género es predecible y puede consistir en tres fases, aunque no es siempre un proceso lineal:

Acumulación de tensión
  • La tensión se va acumulando a través de problemas domésticos y empiezan las agresiones verbales.
  • Ante esto, la víctima intenta manejar la situación complaciendo a quien la maltrata, cede a sus exigencias o evita la confrontación con la falsa convicción de que tales acciones evitarán que la violencia vaya a más.
  • Con el tiempo, la tensión aumenta hasta que llega a un punto crítico y estalla.
Episodio de violencia
  • Este aumento de tensión se da más a raíz de factores externos o por el estado emocional de la persona agresora, que por el comportamiento de la víctima.
  • Por esa razón, el origen del episodio de violencia es impredecible y no está bajo el control de la víctima.
Luna de miel
  • Puede que la persona agresora se avergüence de sus actos.
  • Muestra arrepentimiento e intenta quitarle importancia a la gravedad de la violencia, hace que la culpa recaiga en la víctima.
  • Después, puede que la persona agresora se comporte de forma cariñosa y amable, se disculpe, muestre generosidad y colabore en las tareas del hogar. Se esfuerza para convencer a la víctima de que la violencia no se repetirá.
  • Estas muestras de cariño y arrepentimiento refuerzan la conexión emocional entre ambas personas y son una forma de disuadir a la víctima de que no deje la relación.

Encontrarás más información sobre la culpabilización de la víctima en el Módulo 8.

Los distintos grupos de víctimas

Algunas personas son más vulnerables o tienen un mayor riesgo de sufrir violencia.

Hombres víctimas
Imagen de kjpargeter de freepik

Es importante señalar que los hombres también pueden ser víctimas de violencia doméstica. Si bien la mayoría de las víctimas son mujeres, no deberíamos pasar por alto que los hombres también pueden ser víctimas de violencia en una relación. En ocasiones, son casos invisibilizados, sobre todo en los medios de comunicación. Los estereotipos y los prejuicios que relacionamos con los roles de género contribuyen aún más a la falta de representación de las estadísticas sobre los hombres que son víctimas y eso les desalienta a hablar sobre su situación.

Estudio de caso: hombres víctimas

4:34 p.m. Discusión en el aparcamiento de un centro comercial

Se oye el grito de la señora E. tras darse un golpe en la cabeza contra la puerta del conductor. La gente que pasa por el lugar se percata de la riña entre el matrimonio. Cuando entran en el coche para irse, otro coche les bloquea el paso. El señor E. sale corriendo.

4:37 p.m. Llamada de emergencia al centro de control

Un testigo llama a la policía.

4:50 p.m. La policía llega a la escena

Los testimonios de la señora E. y los presentes no esclarecen los hechos. Según los testigos, el señor E. ha sido violento con la señora E. SIN EMBARGO, la señora E. afirma que fue una mera discusión. Después, intentó meterse en el coche con prisas y se dio un golpe en la cabeza. Siguieron discutiendo y querían irse a casa, pero alguien se interpuso. Es posible que el señor E. saliera corriendo asustado por los ataques verbales de los presentes.
Los policías toman nota de declaraciones y datos personales de los testigos y del señor E. Durante el proceso, también le preguntan detalles a la señora E. para determinar si corre peligro de sufrir otro ataque. La señora E. se niega a pasar por un examen médico. Se le ofrece la posibilidad de que le examinen el golpe en un centro ambulatorio para víctimas de violencia durante los días siguientes de forma legalmente segura, sin coste y, si lo necesita, anónima. Tras informar a la señora E. de sus derechos, uno de los policías aborda con tacto el problema de la violencia doméstica y le comenta la posibilidad de recibir asesoramiento especializado y tomar una perspectiva proactiva. La señora E. escucha los consejos y la explicación de la policía sobre las opciones para protegerla (la Orden de Protección judicial que tiene como objetivo proteger a las víctimas de violencia doméstica, alojamiento en un centro para mujeres, etc.), pero insiste en que en casa todo va bien. Se niega a aceptar la ayuda y el folleto con información que le han ofrecido. Puesto que las circunstancias indican que se trata de un caso de violencia doméstica, los agentes de policía informan a la señora E. de que van a proceder a investigar a su marido por daño físico y le dan un documento sobre protección a la víctima con el número de identificación del caso.

Finalmente, la señora E. vuelve a casa sola en transporte público dada su herida en la cabeza.

7:14 p.m. Llamada de emergencia en el centro de control

El centro de control recibe una llamada de emergencia de los vecinos por ruidos alarmantes que vienen del piso del señor y la señora E.

7:35 p.m. Intervención policial en el piso del matrimonio 

Llegan dos coches de policía a la dirección del matrimonio que ya tenían guardada en el sistema desde la operación de esa misma tarde. Los agentes de policía presumen que puede tratarse de otro episodio de violencia doméstica. El equipo policial entra de inmediato al piso y ve que tanto el matrimonio como la madre de la señora E. se encuentran en estado de embriaguez. Cuando hablan con cada uno por separado, los tres le quitan hierro al incidente y ellas afirman que estaban enfadadas con el señor E. por huir durante el episodio de la tarde y por dejar sola a su esposa con la policía y una herida en la cabeza. Como el señor E. y la madre de la señora E. no presentan lesiones visibles, no hay evidencia sólida de delito. Se pide calma a los presentes y se les informa de que, si vuelven a llamar a la policía, darán cuenta de una infracción administrativa por ruido molesto.

9:44 p.m. Llamada de emergencia al centro de operaciones

Los vecinos vuelven a llamar al centro de emergencias por ruido molesto. Informan de que «las cosas van a más con los de al lado. Parece que están teniendo otro de sus problemas».

10:10 p.m. Actuación policial en el piso del matrimonio E.

Vuelven a enviar dos coches de policía porque sospechan que se trata de un caso de violencia doméstica. Hay dos agentes de la operación anterior en el piso de la familia E.  Observan que tanto el nivel de embriaguez del matrimonio E. como el de la madre de la señora E. parece ser más alto que la vez anterior. Además, todos presentan manchas de sangre, heridas en las manos, brazos y el rostro. Las heridas del señor E. en concreto son graves. 
Interrogan a los tres por separado otra vez; la señora E. y su madre afirman que el señor E. se puso violento con ellas y tuvieron que defenderse.
El señor E. rompe a llorar enfrente de un agente y le cuenta que no soportaba más la violencia que su mujer y suegra habían ejercido contra él durante años y que no sabía qué más hacer además de recurrir también a la violencia. A pesar de la influencia del alcohol, el señor E. suena verosímil y aporta información concluyente sobre el delito y la violencia hasta la fecha.
La señora E. y su madre reaccionan con agresiones verbales ante la versión del señor E. Ambas quieren atacar al señor E. para que «vea las consecuencias de ir contando mentiras sobre ellas». La policía interviene para que no haya más agresiones hacia el señor E.
El señor E. quiere irse del piso, pero solo pueden ofrecerle alojamiento en un refugio para gente sin techo porque no hay lugares especiales donde puedan quedarse los hombres que son víctimas de violencia doméstica. Quiere contactar con un centro de asesoramiento para hombres afectados por violencia doméstica al día siguiente y que se registren sus heridas en un centro ambulatorio para víctimas. Al contrario que la señora E. y su madre, él quiere tratarse las heridas cuanto antes. Llevan al señor E. al hospital más cercano en ambulancia. De ahí, va solo a un albergue de emergencia. De nuevo, ambas mujeres reiteran que ellas solo «se defendieron» ante los ataques del señor E. Consecuentemente, la policía evalúa el riesgo del señor E. de ser víctima de los ataques violentos de su mujer y suegra.

A los días y semanas siguientes

Durante las investigaciones posteriores, la policía habla con los testigos de la primera discusión en el aparcamiento y con uno de los vecinos de la familia E. El señor E. hace declaraciones exhaustivas a la policía en las que, de nuevo, describe la evolución y el aumento de la violencia hacia él. Afirma que, a su vez, temía cada vez más que descubrieran que era una víctima de violencia en la relación.

El informe médico-forense del centro ambulatorio también se añade a la investigación para respaldar la descripción de los hechos del señor E. La señora E. y su madre solo declaran sobre los cargos de agresión contra el señor E. Se ciñen a su primera versión de los hechos: el señor E. fue la causa del aumento de violencia. Sin embargo, caen en contradicciones que quedan registradas. En cuanto a las lesiones corporales graves del señor E., ambas recurren a su derecho a no declarar.

El señor E. busca consejo en un centro de asesoramiento especializado para hombres afectados por la violencia doméstica. Únicamente se le concede el uso del hogar conyugal.

Tras cuatro semanas, la investigación policial concluye que el señor E. ha sido, presuntamente, víctima de violencia por parte de su mujer y su suegra durante años. Hacen llegar ambos incidentes al Departamento Especial para Casos de Violencia Doméstica de la fiscalía para que se le dé veredicto.

Ejercicio de reflexión

(1) Piensa en tus actitudes y opiniones sobre los hombres que son víctimas de violencia doméstica. Reflexiona sobre los sesgos que puedas tener y piensa en cómo podrías adoptar una actitud más compasiva y empática hacia ellos.

(2) Analiza las normas culturales y las creencias sobre la masculinidad y cómo pueden disuadir a los hombres víctimas de poner una denuncia o buscar ayuda. Reflexiona sobre las formas de cuestionar y redefinir los estereotipos de género dañinos que pueden obstaculizar el apoyo a los hombres víctimas de violencia.

(3) Ten en cuenta la intersección de otras identidades como la raza, etnia, orientación sexual y situación socioeconómica en cuanto a la victimización de los hombres.

Personas con diversidad funcional, deficiencia y enfermedad mental

«Hay de dos a cinco veces más probabilidades de que las mujeres con diversidad funcional sean víctimas de violencia, inclusive el abuso sexual y reproductivo como la esterilización forzada, comparadas con las mujeres sin diversidad funcional».

Hay más del doble de probabilidades de que las personas con diversidad funcional o enfermedades crónicas sufran alguna forma de violencia doméstica y de género que aquellas que no tienen.

Si no puedes ver el vídeo, usa otro navegador o haz clic en este enlacewww.youtube.com/watch?v=yhLsATwO0o4

«La pareja o familiares muchas veces se hacen cargo de los cuidados. Esto los sitúa en una posición de poder de la que se aprovechan para ejercer control coercitivo y aislamiento social de forma dominante y por todos los medios».(1)

«A nivel internacional, ocho de cada diez mujeres con autismo y el 78 % de las personas no binarias con autismo han sido víctimas de violencia sexual, más de la mitad más de una vez».

eucap, 2023

Aquí puedes encontrar como ejemplo la ficha técnica sobre violencia hacia personas con autismo. 

Fuente: SafeLives (2017). Informe spotlight – Disabled Survivors Too. Disabled people and domestic abuse.

Comunidad LGBTIQ+

Hay formas de violencia de pareja que solo se dan dentro de la comunidad LGBTIQ+. Por ejemplo, una persona en una relación puede amenazar con revelar la orientación sexual o la identidad de género de su pareja como forma de maltrato. Esto no solo atenta contra la víctima, sino que también crea un muro que impide que busque ayuda.

Además, es probable que las víctimas LGBTIQ+ de violencia doméstica hayan sufrido episodios anteriores de trauma físico o psicológico, como acoso o delitos de odio. En concreto, las víctimas transgénero tienen más riesgo de ser objeto de formas específicas de violencia de pareja, entre ellas: amenazas, intimidación y acoso dentro del contexto de una relación de maltrato.

Si no puedes ver el vídeo, usa otro navegador o haz clic en este enlace: www.youtube.com/watch?v=xShhv7cQHlc

Ejercicio de reflexión

(1)  ¿Por qué las personas LGBTIQ+ están entre los grupos más vulnerables de víctimas de violencia doméstica?

(2)   Piensa qué obstáculos impiden que las víctimas de VD accedan a servicios de asistencia sanitaria.

Encontrarás más información sobre la representación mediática de la comunidad LGBTIQ+ en el Modulo 8.

Personas refugiadas y migrantes

Las personas que no tienen la nacionalidad o documentación oficial lidian con más obstáculos como barreras lingüísticas, aislamiento social, acceso limitado a información y recursos económicos, normas culturales o miedo a la deportación.

En los casos de violencia doméstica y de género, en muchas ocasiones las personas migrantes tienden a no denunciar porque temen las posibles consecuencias. Su situación como persona migrante también puede obstaculizar el acceso a servicios de apoyo esenciales.

Fuente: WWP European Network

Si no puedes ver la presentación, usa otro navegador o haz clic en este enlace.

Estudio de caso: mujer víctima de procedencia migrante

Nora es una mujer de 34 años de procedencia migrante. Lleva tres años viviendo en tu país con sus padres y hermanas. Nora se casó con Peter hace dos años. Peter es el hijo de un amigo de los padres de Nora. La familia de Nora viene de una cultura patriarcal donde la comunidad se antepone al individuo.

El matrimonio de Nora con Peter fue un alivio para la familia de Nora, pues su cultura considera que una mujer de su edad no debería estar soltera. Sin embargo, poco después de casarse, Peter empezó a controlar su vida cotidiana. Peter no deja que Nora vea a sus amistades ni salga sin él. Únicamente puede salir sola para asistir a un curso obligatorio de idiomas.

Peter se queda con la tarjeta de crédito de Nora y pide préstamos a su nombre. Cuando Nora intenta resistirse, Peter se pone violento y la trata mal. Peter amenaza con enviar a Nora de vuelta a su país natal.

Nora cuenta la situación a sus padres y les pide ayuda. Al principio, los padres de Nora se toman en serio el comportamiento violento de Peter, pero el padre de Nora fallece inesperadamente. La madre de Nora, en duelo, no se ve capaz de enfrentarse a Peter sola.

Además, Peter difunde rumores sobre la supuesta inmoralidad de Nora para justificar a su comunidad las acusaciones de violencia contra él. Los rumores son una humillación para la familia de Nora. La comunidad presiona a la madre de Nora y a las familias de sus hermanas para que limpien su apellido.

La madre de Nora le suplica que se quede con Peter para calmar la situación y sus hermanas le piden que no vuelva a molestar a su madre. Nora piensa que es la causa de la violencia y que recae en ella la reputación de su familia. Descarta la posibilidad de divorciarse de Peter.

Con el tiempo, la violencia se vuelve más seria y frecuente. Durante un episodio, Peter estrangula a Nora por tanto tiempo que pierde el conocimiento. Tras ello, empieza a presentar un trastorno del habla; le cuesta hablar sobre todo en situaciones de estrés. Nora se siente aislada, impotente y deprimida.

Peter la amenaza con difundir fotos íntimas si «arruina su reputación como marido». Nora sufre ansiedad, pues no puede hablar con nadie, ni siquiera con su familia, sobre cómo se siente.

Ejercicio de reflexión

Esa es la historia de Nora. Reflexiona sobre las siguientes preguntas:

(1) ¿Qué tipos de violencia doméstica y de género sufre Nora?

(2) ¿Qué acciones, situaciones o circunstancias ponen en peligro a Nora?

(3) ¿Cuáles de las situaciones descritas en el estudio de caso consideras injustas, pero no crees que debas intervenir como profesional de primera línea?

Menores y adolescentes 

Imagen de Gerd Altmann de Pixabay

«Se estima que, alrededor del mundo, mil millones de menores de 2 a 17 años han sido víctimas de violencia física, sexual o emocional, o abandono en 2015».

Hillis, S., Mercy, J., Amobi, A., & Kress, H. (2016). Global prevalence of past-year violence against children: A systematic review and minimum estimates. Pediatrics, 137(3).

La violencia hacia las/los menores puede tener consecuencias irreversibles para su salud y bienestar. Las hijas e hijos de parejas en las que hay violencia doméstica y de género pueden sufrir traumas serios, incluso si solo son testigos oculares de esta:

  • Desarrollan mecanismos de defensa negativos y comportamientos que ponen en riesgo su salud (adicción al alcohol y las drogas, un índice más alto de ansiedad, depresión, otros problemas para la salud mental y el suicidio).
  • El desarrollo del cerebro y del sistema nervioso se ven alterados (afecta de forma negativa a la cognición y disminuye el rendimiento académico).
  • Aumenta el riesgo de ser víctima o ejercer malos tratos en el futuro.

Fuente: OMS Maltrato infantil

El siguiente caso refleja lo explicado:

Estudio de caso: la violencia doméstica y de género perjudica a las/os menores

Gaby se casó con Nick tras una larga relación. Poco después, se mudaron a la casa de campo de la familia de Nick. La pareja vivía felizmente y al poco tiempo tuvieron a su primera hija. El comportamiento de Nick empezó a cambiar durante el embarazo y para cuando nació su hija, la relación ya no era «lo mismo». Nick parecía haberse cerrado en sí mismo y pasaba mucho tiempo solo. Gaby empezó a pensar que Nick se parecía cada vez más a su padre, un hombre que siempre había tenido una presencia autoritaria en su vida.


La conducta de Nick empezó a ser amenazante y controladora, especialmente en lo que se refería al dinero y las relaciones sociales. Se volvía cada vez más agresivo cuando discutían y muchas veces gritaba y lanzaba cosas. Gaby pensaba que por el hecho de no hacerle daño físico, aquello no era maltrato. Nick no mostraba interés alguno por su hija Jane, excepto en público. En público se volvía un padre de lo más cariñoso.


Jane tardó mucho en gatear, caminar y empezar a hablar. Sus hábitos de sueño se veían alterados y Gaby apenas conseguía dormir por la noche, incluso cuando Jane tenía más de 12 meses. Cuando Jane empezó a hablar, tartamudeaba, lo que complicaba aún más su desarrollo del habla. A Gaby le preocupaba mucho Jane. El pediatra le dijo que era algo normal en algunos niños y niñas y que, si seguía teniendo problemas con el habla, siempre podía enviar a Jane a un especialista.


Al cabo de unos años, la actitud de Nick se volvió insoportable para Gaby. Durante las discusiones, él sostenía la escopeta que usaba cuando trabajaba en la granja, algo que la asustaba bastante. En varias ocasiones, los objetos que lanzaba Nick daban a Gaby. Ella temía cada vez más por la vida de su hija, así que decidió marcharse y recurrir al centro de mujeres más cercano. Ahí la ayudaron a conseguir una orden de intervención contra Nick.


Una vez Gaby alejó a Jane de Nick, la pequeña cambió. El desarrollo de Jane parecía acelerarse y Gaby no lo entendía. Como parte del servicio del centro de mujer, Gaby tenía un terapeuta, así que le preguntó sobre el problema de Jane. Le explicó que los retrasos en el desarrollo, la tartamudez, la irritabilidad y la ansiedad ante la separación eran consecuencia de la situación de maltrato que había vivido.


Este es un ejemplo de violencia familiar que podría haberse identificado a tiempo. Si el pediatra hubiera preguntado a Gaby o a Nick (quien presentaba dolor lumbar crónico) cómo era su relación y qué estaba pasando en casa y, en concreto, qué le pasaba a Jane, esta situación podría haberse detectado mucho antes.

Ejercicio de reflexión

(1) ¿Cómo podrían haber actuado mejor las personas involucradas?

(2) Tómate un minuto para considerar qué servicios y profesionales deberían haberse involucrado para apoyar u ofrecer ayuda a Gaby desde el principio.

Adaptado de un caso de estudio de RACGP (2014). Abuse and Violence: Working with our patients in general practice

Personas mayores

«Aproximadamente una de cada seis personas mayores de 60 años
sufrió algún tipo de maltrato
en los entornos comunitarios el año pasado [2021]»

OMS, 2022

Posibles personas agresoras:

  • Descendientes, cónyuges y otros familiares.
  • Personal de la residencia o centro para mayores.

Dificultades a la hora de denunciar:

  • Miedo a que el maltrato aumente.
  • Dependencia de la persona que la cuida.
  • Cuanto más mayor se hacen las personas, más disminuye la voluntad y la capacidad de escapar de relaciones de maltrato.

Recuerda: las personas mayores que son víctimas de violencia doméstica y de género pueden ser reacias a hablar sobre el maltrato que sufren. Puede que les avergüence su situación o quieran ayudar y proteger al hijo/a que las maltrata. Denunciar la violencia doméstica y de género a la policía puede llevar a la pérdida de la relación más importante de sus vidas.

Estudio de caso: maltrato a personas mayores

Winnie es una señora de 69 años que vive sola en un pequeño pueblo. Es una de tus pacientes desde hace tiempo. Padece de artritis aguda y cada vez necesita más ayuda con las tareas cotidianas. Le cuesta seguir adelante, incluso con las visitas periódicas de los Servicios Sociales, pero insiste en que no quiere ir al hospital regional.

Finalmente, se muda con su hija, su yerno y sus nietos. Los vecinos se empiezan a quejar del ruido. Desde que se mudó Winnie, no hay mucho espacio en la casa y los niños se pelean, gritan y juegan cada vez más. Las hermanas de la hija de Winnie no la ayudan y esperan que ella se encargue de las tareas del hogar (hacer la colada, cocinar, etc.) sin rechistar.

Cuando visitas a Winnie te das cuenta de que tiene marcas y moratones en los brazos y en la parte superior del torso. La hija da una explicación convincente y comenta que cada vez se vuelve más torpe y no para de chocarse contra los muebles. Además, se toma anticoagulantes. Winnie se limita a asentir con la cabeza sin articular palabra incluso cuando le preguntas en privado si todo va bien. Te preocupa ser demasiado insistente porque no quieres hacer saltar las alarmas innecesariamente.

Adaptado de un caso de estudio de RACGP (2014): Abuse and Violence: Working with our patients in general practice

Ejercicio de reflexión

Debate sobre el caso de estudio.

(1) ¿Qué habrías hecho como médico de Winnie en esta situación?

(2) ¿Qué factores ponen a Winnie en riesgo de sufrir violencia doméstica y de género?

Mujeres embarazadas

«En Europa, una de cada cuatro mujeres sufre
violencia física o sexual durante el embarazo».

Imagen de Freepik

El embarazo puede ser un factor detonante de violencia de género. Si ya hay violencia en la relación, esta puede aumentar durante el embarazo o el posparto. Ser objeto de violencia de género durante el embarazo implica un gran riesgo tanto para la madre como para el feto. Las probabilidades de sufrir un aborto, infecciones, dificultades a la hora de dar a luz, un parto prematuro y dañar o causar la muerte del bebé incrementan.

Además, tiene consecuencias graves en el ámbito emocional y en la salud mental de la madre. El estrés y la ansiedad a raíz de la presencia de violencia de género podrían repercutir de forma negativa tanto en el desarrollo del bebé como en el bienestar de la madre.


6. Personas agresoras de violencia doméstica y de género

En los casos de VD y VG también es importante tener una visión más detallada del papel que desempeña la persona que agrede. Es imposible ponerle fin al ciclo de la violencia si no se tiene en cuenta a los responsables de esta. Por ello, hay instituciones y autoridades (servicios de libertad condicional, servicios de liberación de prisión, centros de asesoramiento para hombres, cárceles…) que se especializan en trabajar con los hombres que producen el hecho delictivo. 

«La campaña contra la violencia doméstica necesita las voces tanto de hombres como de mujeres que cuestionen la cosmovisión sobre la que se han construido los contextos culturales, económicos y políticos».

Su Alteza Real la Duquesa de Cornualles en el Women of the World Festival (marzo de 2020). Centro Nacional de Violencia Doméstica, Reino Unido
Definición

La persona agresora es aquella que ataca, desprecia o explota a otra o permite de forma consciente que alguien sea objeto de tales formas de violencia. Las agresiones también pueden ser incitadas por terceras partes. 


El vídeo explica quiénes ejercen violencia doméstica y de género.

¿Quién es la persona agresora?

Al igual que las víctimas de violencia doméstica y de género, cualquier persona puede ejercer malos tratos sin importar la edad, el género o el grupo socioeconómico, racial, étnico, profesional, educativo o religioso al que pertenezca. Las personas agresoras no siempre son agresivas y hostiles, sino que pueden ser gente encantadora, agradable y atenta. Los patrones de maltrato y el nivel de peligrosidad pueden diferir según el caso.

Si no puedes ver el vídeo, usa otro navegador o haz clic en este enlace: www.youtube.com/watch?v=NjijqDbcuDs

¿Por qué las personas se vuelven abusivas?

La VD y VG surge a raíz de muchos factores. La presencia de estos aumenta el riesgo de violencia, pero cada persona agresora y víctima tiene un perfil de riesgos específico:

  • Los factores personales, circunstanciales y socioculturales influyen en las probabilidades de que alguien se vuelva violento.
  • Algunas variables como la adicción al alcohol y a las drogas, los roles de género, los traumas pasados, el embarazo, el posparto y el haber sufrido maltrato infantil aumentan el riesgo de violencia doméstica y de género.
  • En las dinámicas de violencia unidimensional y unidireccional es fácil distinguir entre la víctima y la persona agresora, ese suele ser el caso de la violencia en pareja o de una agresión durante una discusión en caliente.
  • Sin embargo, en algunas relaciones también hay violencia bidireccional. En ella, ambas personas son violentas en momentos distintos.
  • La violencia bidireccional es más frecuente en relaciones en las que ambas partes tienen problemas de adicción.
La rueda del poder y control 

Las personas agresoras recurren a un conjunto de tácticas para ganar o mantener el poder y control de las víctimas y, en los casos de violencia de pareja, para impedir que dejen la relación. Esta complejidad no es fácil de reflejar en una sola imagen. Sin embargo, el proyecto de Intervención de Violencia Doméstica de Duluth, (Minnesota, EE.UU.) presentó la rueda del poder y control por primera vez en 1984 para ayudarnos a entender mejor las dinámicas en las relaciones de violencia doméstica y de género. El interior de la rueda describe las conductas discretas, continuas y paulatinas, mientras que el exterior representa la violencia física y sexual.(1)

Copyright by the Domestic Abuse Intervention Project
202 East Superior Street, Duluth, MN, 55802
218-722-2781
Si no puedes ver el vídeo, usa otro navegador o haz clic en este enlace: www.youtube.com/watch?v=5OrAdC6ySiY

La relación de las/os menores con la persona agresora y las consecuencias

Imagen de rawpixel.com de Freepik

A menudo se considera que las/os menores son las víctimas «invisibles» de las familias afectadas por la violencia doméstica y de género. Aquellos que han sido sujeto de violencia doméstica y de género posiblemente muestren síntomas físicos relacionados con traumas y estrés.

Las/os menores testigos de violencia experimentan una mezcla de emociones hacia la persona agresora: ansiedad, miedo, enfado, cariño, lealtad y amor. Es posible que redirijan su enfado hacia la víctima en vez de a la persona que agrede. Además, puede que deseen crear una conexión positiva con esta última.

Las mujeres como agresoras

En el ámbito académico y literario, no se ha tenido mucho en cuenta el papel de la mujer, sobre todo las madres, como agresoras o testigos pasivos de violencia doméstica.

Un estudio de 2021 revela que «la población general subestima el papel de las madres biológicas en el abuso sexual infantil. Los resultados afirman que las mujeres agresoras representan una parte pequeña, pero significativa, de las personas que cometen abuso sexual infantil. Asimismo, los resultados indican que las madres actúan o bien como agresoras o bien como testigos pasivos. Este es un hecho que se ha estado pasando por alto». (1)

Trabajar con personas agresoras

Trabajar con personas agresoras es una parte fundamental de la lucha contra la violencia doméstica y de género, especialmente en lo referente a la violencia de pareja.

En este enlace encontrarás un mapa interactivo de programas para personas agresoras, profesionales del ámbito de la investigación y servicios de apoyo a la víctima.


Referencias

Aqui encontrarás materiales de formación.

Formas más comunes de violencia en el contexto de la violencia doméstica y de género
Tipos especiales de violencia en el contexto de la violencia doméstica y de género

Mutilación genital femenina (MGF)

Femicidio

Violencia filio-parental (VFP)

Coerción reproductiva

  • (1): Grace KT, Anderson JC (October 2018). «Reproductive Coercion: A Systematic Review». Trauma, Violence & Abuse. 19 (4): 371–390. doi:10.1177/1524838016663935. PMC 5577387. PMID 27535921.
Víctimas de violencia doméstica y de género

Personas con diversidad funcional, deficiencia y enfermedad mental

Personas mayores

Violencia por motivos de honor

Personas agresoras de violencia doméstica y de género

La rueda del poder y control 

(1) La rueda del poder y control

Las mujeres como agresoras

(1) Gerke, J., Lipke, K., Fegert, J. M., & Rassenhofer, M. (2021). Mothers as perpetrators and bystanders of child sexual abuse. Child Abuse Negl., 117, 105068. doi: 10.1016/j.chiabu.2021.105068.

La relación de las/os menores con la persona agresora y las consecuencias

(1) Humphreys, C., & Houghton, C. (2008). Literature Review: Better outcomes for children and young people exposed to domestic abuse – Directions for good practice. Edinburgh: Scottish Government. www.dera.ioe.ac.uk/id/eprint/9525/1/0064117.pdf